miércoles, 18 de junio de 2008
Descubra un puente en esta fotografía
Si la vegetación de las laderas de los ríos no se controla, se convierte en una auténtica selva. Son muchos los rincones de Pamplona en los que se están adueñando los árboles que nacen espontáneamente, produciendo un daño en las construcciones así como un deterioro en la belleza del conjunto. El puente de la Magdalena es uno de ellos. Aquí ya no se advierte cuántos ojos tiene el puente. Sin duda su belleza y armonía han quedado ocultos por árboles y arbustos. Fácil solución, ¿no?
Pendiente de publicar en el Diario de Navarra a día de hoy.