Junto a la parada de autobús que se encuentra al lado de la cafetería del Hotel Tres Reyes, se puede ver cómo está la acera. No sólo levantada, también se ha producido un pequeño socavón. Esto, que puede ser algo anecdótico, es algo generalizado en toda Pamplona. Hace tiempo una lectora del Diario de Navarra comentaba si hay algún fallo en el procedimiento de adherir las baldosas al pavimento. Yo creo que sí, sobre todo teniendo en cuenta que de 100 baldosas pisadas, más de 30 están sueltas. Esto no sólo ocurre con las más antiguas, también con las que llevan pocas semanas (el porcentaje se incrementa en determinados lugares). Y felicito a los colocadores de baldosas, con lo dicho les auguro mucho tiempo de trabajo en Pamplona. Ah, y también a las lavanderías, que con las lluvias produce un incremento de pantalones sucios. No se olviden de guardar las facturas de lavandería, y remítanlas al Sr. Concejal que dice que todo está bien. A ver si de este modo se da cuenta de cómo están las calles de Pamplona. Y no esperen que se las paguen, que para eso no hay presupuesto.
Por último, qué buen ejercicio de ciudadanía sería que nuestros concejales hagan más uso de las calles, no sólo andando, tambien en bicicleta, monopatín o lo que quieran, pero que dejen los automóviles en casa.
Pendiente de publicar en el Diario de Navarra
